Plasmage es un tratamiento estético innovador que utiliza tecnología de plasma para tratar diversas afecciones de la piel, especialmente en la zona de los ojos y los párpados. Esta técnica no invasiva, también conocida como “párpado sin cirugía”, es una alternativa a la cirugía estética tradicional y ofrece resultados similares sin la necesidad de cortes o suturas.
El Plasmage funciona mediante la creación de un arco eléctrico entre la piel y el dispositivo de plasma, que genera un calor controlado y selectivo en la capa superficial de la piel. Este calor induce la contracción de las fibras de colágeno y la regeneración de nuevas células, lo que ayuda a mejorar la apariencia de la piel y reducir la flacidez y las arrugas.
El tratamiento Plasmage es adecuado para tratar una variedad de afecciones de la piel, incluyendo el exceso de piel en los párpados superiores e inferiores, las arrugas en el área periocular, las líneas de expresión y las cicatrices. También se puede utilizar para corregir la asimetría facial y mejorar la apariencia general del rostro.
El tratamiento se realiza en una sola sesión y no requiere anestesia general ni hospitalización. Durante la sesión, se aplica una crema anestésica tópica en la zona a tratar para minimizar cualquier posible molestia o dolor. Una vez que se completa el tratamiento, el paciente puede regresar a sus actividades diarias sin necesidad de tiempo de recuperación.
En general, el Plasmage es un tratamiento seguro y eficaz que ofrece resultados notables en un corto período de tiempo. Sin embargo, como con cualquier procedimiento médico, existen algunos riesgos y efectos secundarios potenciales que deben ser discutidos con el especialista antes de realizar el tratamiento. Es importante hablar con un especialista en tratamientos estéticos y hacer todas las preguntas necesarias antes de tomar una decisión sobre el tratamiento de Plasmage.